La tecnología de pantallas OLED ya está en boca de todos: pantallas ultrafinas, flexibles e incluso transparentes. Pero, ¿que sabemos de esta tecnología? ¿Cuáles son las ventajas? ¿Estará a nuestro alcance en un futuro próximo?
La abreviatura inglesa OLED hace referencia a las siglas de Organic Light Emitting Diode (Diodo emisor de luz orgánico), una tecnología que utiliza una capa electroluminiscente formada por una película delgada orgánica para reaccionar cuando se aplica una corriente. Emitiendo luz por ella misma.
Este concepto en sí tiene más ventajas que sus antecesores, porque los anteriores están basados en tecnología LCD que deben retroiluminados mediante el uso de plasma o LEDs. Por otro lado, los OLED no requieren sistemas de iluminación auxiliares, lo que les permite ganar en términos de reducción de tamaño, contraste de color y eficiencia energética.
Aún existen limitaciones en el uso de pantallas OLED, como los altos costos de producción, la dificultad en el reciclaje, o la complejidad de la tecnología para obtener grandes tamaños; por lo que no veremos grandes muros exteriores cubiertos con LED orgánicos.
Los últimos avances en esta tecnología en evolución muestran que esta fina capa de LED orgánicos se puede depositar sobre una superficie flexible, lo que permite reproducir imágenes dobladas o utilizarlas como soporte transparente. Ya ha llegado el día en el que nuestro smartphone lo hemos «desdoblemos» para conseguir una tablet, y poder ver nuestros videos favoritos de la manera más cómoda.
Por ahora, el uso de OLED habrá que esperar un tiempo para perfeccionarse, pero sin duda esperaremos el nacimiento de una revolución tecnológica.
